Un insólito pedido al Señor y la Virgen del Milagro, durante la peregrinación en Salta, se volvió viral días atrás. Un joven, llamado Dano Cuellar, fue a rogar que “no lo gorreen más”.
La semana pasada, Salta vivió la Fiesta del Señor y la Virgen del Milagro. Esta celebración es conocida por los miles de peregrinos que caminan desde diferentes pueblos de la provincia norteña y durante días para llegar a la Catedral a adorar las imágenes de sus "santos patronos". Es una masiva manifestación de fe y también de sacrificio. Todos los hacen para cumplir alguna promesa.
En este contexto es que Dano Cuellar, un humorista e influencer salteño, protagonizó un video que se viralizó de inmediato en las redes sociales. “Soy peregrino. He venido porque, usted sabe, me han gorriao y es por eso que vengo a pedirle al Señor y a la Virgencita que ya no me gorreen más por favor”, dice frente a la cámara.
Si bien se trató de un video de humor, generado por el propio influencer, las imágenes no pasaron desapercibidas. Tanto es así que circuló en todas las redes sociales desde su publicación.
Más de 700.000 creyentes recorrieron, en la tarde del viernes pasado, las calles de la ciudad de Salta para manifestar su fe por el Señor y la Virgen del Milagro. Se trata de una de las fiestas religiosas más convocantes del país que se celebra hace 331 años.
La celebración reunió a salteños y peregrinos de distintos parajes y provincias, que a pura emoción siguieron la procesión de las imágenes de la virgen y el cristo que resguarda la Catedral.
Los feligreses caminaron al ritmo de cantos y oraciones, desde la plaza 9 de Julio hasta el Parque 20 de Febrero, donde las autoridades eclesiásticas agradecieron tal manifestación de fe y dejó un mensaje para la ciudadanía y los gobernantes, ante la proximidad de las elecciones presidenciales.
Monseñor Mario Antonio Cargnello, quien encabezó la homilía, pidió “honestidad y prudencia” a los gobernantes en nombre de la Iglesia Católica. “La madre Iglesia cuando reza por la Nación pide honestidad para los ciudadanos, y para los ciudadanos que llegan a ser gobernantes pide también, además de la honestidad, la prudencia. La honestidad comporta no mentir, no engañar, no robar, no hacer trampas. Y es más que eso, implica mostrar respeto hacia los demás y tener integridad y conciencia de sí mismos”, recalcó.
En cuanto a su pedido de prudencia, dijo: “es la virtud del obrar bien aquí y ahora. Conoce la realidad y actúa teniendo en cuenta las personas y sus circunstancias. Sabe adelantarse a las acontecimientos escuchando y discerniendo qué es bueno en este momento para los demás".